El 20 de Julio de 1969, el módulo lunar “Eagle”, perteneciente a la misión “Apollo XI” aterrizaba en la Luna. Dentro de él viajaban Neil Armstrong, comandante de la misión y Edwin Aldrin, piloto del vehículo espacial.
Sin Aldrin, esta famosa foto de Armstrong no se hubiera tomado.
A Armstrong le correspondió el honor de ser el primer humano que plasmara sus huellas en el suelo del satélite y casi todos conocemos su famosa frase: “Un pequeño paso para un hombre, un gran salto para la humanidad“.
Pero, hoy, en Heroísmo Agonizante 101, citamos a Edwin “Buzz” Aldrin, segundo hombre que pisó la superficie lunar, que cuando al regresar a la Tierra vio una grabación sobre la cobertura que la prensa mundial dio al evento y el impacto que tuvo su hazaña sobre la humanidad. Expresando su consternación a Armstrong, le dijo:
“Hey, Neil, nos perdimos todo el show”.
Y con esta gran frase surge la reflexión. Cuando uno está en vórtice del huracán rara vez se da cuenta de la repercusión de sus actos. La concentración que uno empeña en la consecución de la tarea a veces impide observar lo que sucede alrededor.
Y eso por eso, estimado lector, amable lectora, que cuando estés haciendo algo – cualquier cosa – aunque creas que no tiene importancia, hazlo de tal manera que cuando voltees a ver la reacción de la gente, la grandeza esté presente en tus acciones. En el momento de la acción quizá no te sea posible apreciar la reacción de los demás, pero ten la seguridad de que siempre hay alguien que te está observando. Y en todo momento existe una humanidad deseosa de reconocer los actos heroícos de otro humano. Los tuyos, por ejemplo.
Veremos.
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Texto por Rogelio RiveraMelo