La Retórica de lo Trivial XXV Por Rogelio Rivera Melo
“Hoy por ser día de las madres, te venimos a cantaaaaar”
10 de Mayo, “Día de la Madre” nos dicen las tiendas, comerciales, anuncios, y vendedores de flores, chocolates, vajillas y enseres domésticos…
Pienso que ponerle etiqueta a un día para hacerlo memorable es algo que peca de injusto. Sobre todo cuando las madres están ahí, diariamente, para ser el apoyo de sus hijos. No creo en la justicia que pueden dar 24 horas para “festejar” a quienes nos atendieron – y estuvieron con nosotros – tantos y tantos días.
No es necesario tener estudios de filosofía, sociología, humanística, antropología. Basta con observar los ojos de un niño cuando miran a los de su madre para comprender el amor existente entre esas dos personas. Y ese simple gesto, esa comunión de humanidad no la puede suplantar ningún regalo material.
Hoy. Igual que ayer. Aquí, como en cualquier otro lugar, en otro país. Hay una mujer que está velando por su hijo. Y lo digo con toda seguridad sé que incluso las que no están más en este mundo continúan cuidando a sus “bebés”. Lo sé.
La relación madre-hijo es el vínculo humano más fuerte que existe. Hay relaciones de este tipo que son amorosas, tormentosas, satisfactorias, traumatizantes, complicadas, de complicidad, demasiado cortas, estilizadas, sangrientas. Hay momentos en que madres e hijos quedan hartos (acéptelo, existen, pero son pocos comparados con los momentos buenos). También habrá situaciones en que la tirantez y la tiranía sean parte de la ecuación. Somos humanos. Pero todos – hasta el asesino más desalmado – tuvo alguna vez, el amor de su madre.
Cuando un pequeño dice “mamá” por primera vez, se conjuga, en ese vocablo, todo el mecanismo universal de la humanidad. Y es cuando uno entiende toda la grandeza que contiene esa palabra. La conciencia del regalo de la vida. Un regalo que nos ha sido entregado a través de una mujer.
¿Qué más se puede decir?
Hoy doy gracias a todas las mujeres que han sido parte en el milagro de la vida. Sin ellas no estaríamos aquí, ni usted, lector, ni yo. Ni nadie. Tan lógico y coherente que parece tonto decirlo.
Gracias a mi madre. Gracias a la madre de mis hijos. Gracias a las madres de todos ustedes. A las que ya se han ido, un recuerdo de amor hasta donde estén. Y si usted, lectora, es mamá… reciba un abrazo y un beso de mi parte. Confío en que hoy, al menos, reciban una gran porción del amor que a diario entregan.
Hoy no veremos… Hoy estaremos con mamá.
Yo también soy el que soy. 
Heroísmo Agonizante 101 (Sólo para principiantes) 
Muy bien Roy, me gustó mucho, indiscutible tienes un estilo propio y desarrollado.
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No creo que hasta el asesino más desalmado haya tenido alguna vez el amor de su madre. Es importante recordar que hay madres que simplemente no quieren a sus hijos, y que por supuesto eso genera tremendos problemas de sociabilidad y patologías profundas. Si quien se supone que debe querernos no nos quiere, ¿qué podemos esperar del resto del mundo?
Por lo demás, no puedo discutirlo. Porque no soy mamá y porque no tengo, así que… ¿qué puedo decir?
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Alguna vez lei que las mujeres que son madres, son las unicas que saben como caminar hasta en los lugares mas obscuros, la mia… sabe bien como hacerlo.
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Gracias Roy, muy bonito mensaje. la conexión que hay te puedo decir desde el embarazo, es algo mamífero, extraño, vas descubriéndote como creadora de vida. Y el ser que está dentro de ti, la vida que se va manifestando, es inexplicable. Inigualable. Yo espero que sea buena madre, darle el amor suficiente, educarlo correctamente, que haga un buen hombre, y cuando crezca siga queriéndome y amándome como me ama hoy.
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Gracias Roy, y sí es una «labor» hecha con amor todos los días. Son almas unidas. Es un vínculo particular desde que lo gestas. Y uno se dará por bien servido al verlos hechos hombres (o mujeres) de bien. Un abrazo. Y si felicítalas más allá de la mercadotecnia. Porque es una verdadera joda. : )
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Una labor q al día de hoy respeto más q nunca, un amor q en tus palabras suena muy lindo pero q no describen al 100% su grandeza, hoy te digo jamás imagine q este amor existiera y si me pides q te lo describa sólo te puedo decir q mataría a quien fuera por defenderla…
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En España festejamos ese día el primer domingo de mayo. Y no regalo nada, ni quiero que me regalen. Un beso de mis hijas, un abrazo a mi madre. Y ya. Lo demás son todo inventos del Corte Inglés para vender más.
Felicidades a la mamás mexicanas, que sus hijos las llenen de besos y cariño cada día. Ese es el mejor regalo.
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