Si ocurre un desastre natural, lo importante no es lo que se hace después, sino lo que se hizo antes.

Tengo prisa. Nuestros invitados a cenar están a punto de llegar y debo terminar de arreglarme. Todavía me hace falta afeitarme cuando Yuya-san, nuestro anfitrión, me llama. Discretamente, como lo hacen los japoneses.
«Roy-san, ¿quieres jugar cartas con nosotros?»
En la mesa están Tsuki, una niña de 8 años, y Tentaro, un niño de 10, frente a un mazo de cartas color morado. Ambos me miran con interés.
No puedo decir que no.
Tentaro y Tsuki son niños que estudian por las tardes en casa de Yuya. Sus padres aceptaron la propuesta de éste y los envían a practicar su inglés y a convivir con los extranjeros que puedan llegar al AirBnB. «Tienen que aprender que hay un mundo más allá de Japón», me dice Yuya.
Primero, me presento y les digo de dónde soy. «Roy, de México«. Sus ojos se abren de manera maravillosa. «Loy de Mecshico«. A su vez, repito sus nombres con una pronunciación igual de mala. Pero ya nos conocemos.
Las reglas de juego son muy sencillas : Una baraja con 60 cartas. Cinco están repetidas cinco veces: un rascacielos, un puente colgante, una carretera, un aeropuerto y las vías del tren. Esas son la infraestructura básica de la ciudad. Cada uno de los jugadores recibe esas cinco cartas y le pone nombre a su ciudad.
Luego, del mazo central vamos volteando las cartas restantes. En ellas hay seis tipos de desastres naturales: tifón, terremoto, nevada, tsunami y deslave. Cada uno afecta a la infraestructura de la ciudad.
Si me sale la carta del terremoto, mi carta de rascacielos se ve afectada y debo taparla. La única manera de recuperar mi carta es con la carta de «Acciones de Reconstrucción«. De esas hay muy pocas.
Pero hay también varias cartas de «Acciones Preventivas«. Esas las puedes utilizar como método para que el desastre no afecte tu ciudad.
Para poder usar la carta de prevención, se tiene que ir nombrando las acciones preventivas en caso de cada uno de los desastres que pueden ocurrir.
Gana el que tiene una ciudad con la mayor infraestructura operativa cuando se terminan las cartas del centro.
Después de aprender – ellos algo de inglés y español, yo algunos términos en japonés – y de reír mucho – sobre todo por mi pésima pronunciación, mi ciudad estaba en ruinas.
Perdí escandalosamente.
Obviamente noté que hay una estrategia a seguir para ganar. Que no alcancé a implementar porque tenía que irme a cenar. Y básicamente porque mi ciudad es mexicana.
Sé que va a leerse como un cliché, pero tengo que escribirlo: los japoneses están a años-luz de los demás. En juegos de mesa y en prevención de desastres.
Voy a ver si consigo una baraja del juego para llevarla a México. Gran falta nos hace.
Veremos.
* * * * *
Texto : Rogelio Rivera Melo.
Fotos : Jessica.
Comparte este texto.
Y además ¿por qué no? Comparte este blog a través de tus redes sociales. Nos puedes encontrar en Twitter (@HERAGO101), en Facebook (Heroismo Agonizante 101), Tumblr (Heroísmo Agonizante 101) y hasta en Google+ (HeroísmoAgonizante101).
Ayúdame a cumplir el punto 5 de mi lista de las100 cosas que tengo que hacer antes de morir. Nos encantaría lograrlo pero necesitamos tu ayuda. Si es de tu agrado lo que aquí se publica, compártelo. Ayúdame a morir feliz. Gracias mil.
Yo también quiero un juego de esas cartas 😀😀😀(… en serio)
Me gustaLe gusta a 1 persona