El doctor Michael Ellis DeBakey es considerado un genio en el campo médico mundial. Nacido en 1908, en el estado de Louisiana, E.U., DeBakey inventó nuevas técnicas, mejoró las existentes y se convirtió en el pionero de la cirugía cardiaca. Cuando murió en 2008, las aportaciones que realizó a la ciencia como el bypass de la arteria coronaria y la cirugía a corazón abierto, la implantación de mecanismos de ayuda artificial ventricular y el corazón artificial Jarvik, ayudaron a salvar a cientos de miles de vida en todo el mundo, convirtiéndolo en un verdadero héroe de la humanidad. Sus libros sobre salud cardíaca son un referente para todos aquellos que sufren, o que quieren evitar, afecciones en el corazón.
Durante sus 99 años de vida, el talentoso Dr. DeBakey aprendió valiosas lecciones de vida. Heroísmo Agonizante 101 compartirá estas enseñanzas con ustedes durante los siguientes sábados.

El doctor Michael DeBakey.
Lección 5.
Nunca abandones tus sueños.
El interés de Michael DeBakey por la medicina comenzó en la farmacia de su padre. Ahí escuchaba las conversaciones profesionales de los viejos galenos. Desde joven, DeBakey decidió ser médico. ¿Pero en qué especialidad? En 1932, no había nada que uno pudiera hacer para remediar un «mal del corazón». Si un paciente sufría un ataque cardíaco era muy común que muriera, tarde o temprano.
Mientras aún estudiaba, en 1932, DeBakey inventó la bomba rotatoria, una máquina que realiza las funciones del corazón y los pulmones durante una cirugía a corazón abierto. Esta acción inició la época de las cirugías en el corazón.
La invención de la bomba rotatoria estableció las bases de la pasión de DeBakey para innovar y dejar una huella pemanente en el mundo de la medicina cardiovascular.
Una de las recetas del éxito es comprometerse – con el corazón, la mente, el alma, la voluntad – con un sueño que te haga avanzar. ¿El trabajo que realizas te hace sentir así? ¿Ya vendiste, abandonaste, aplazaste tu sueño?
Recuerda que esos sueños son los que mantienen vivo, incluso dentro de un mundo lleno de rutina y desencanto.
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Tarea Semanal: ¿Cuál fue mi primer sueño? ¿Ya lo cumplí? ¿Aún hay tiempo para resucitarlo? Que difíciles preguntas.
Veremos.