La cita del primer viernes de 2014 versa sobre la capacidad de desarrollar un hábito. Tomen nota, lectores, lectoras, para sus propósitos de este año.
Del psicólogo Jeremy Dean sobre el tiempo que se necesita para desarrollar un nuevo hábito, en su libro Making Habits, Breaking Habits.
«Digamos que quieres comenzar a asistir al gimnasio o tocar instrumento musical. ¿Cuánto tiempo te tomará antes que comiences a verlo como una obligación y lo empieces a hacer automáticamente?
En un estudio realizado en el University College London, se pidió a 96 participantes elegir un comportamiento diario que desearan convertir en un hábito. Todos escogieron algo que no hacían antes pero que pudieran repetir todos los días; muchos se relacionaron con la salud: algunos mencionaron cosas como «comer un trozo de fruta en el almuerzo» o «correr 15 minutos después de la cena». Durante los 84 días que duró el estudio, se conectaban a un sitio web e informaban si habían llevado a cabo, o no, el comportamiento deseado, así como que tan automático lo habían sentido.
La respuesta simple es que, en promedio, entre los participantes que proporcionaron datos suficientes, les tomó 66 días para que se formara un hábito. Como puedes imaginar, existió una considerable variación en el tiempo necesario para que se desarrolle una costumbre, dependiendo de la acción que las personas trataran de hacer. Aquellos que decidieron tomar un vaso de agua antes del desayuno lograron hacerlo de manera automática después de 20 días, mientras que a aquellos que trataron de comer un trozo de fruta en el almuerzo les tomó casi el doble de tiempo volverlo un hábito. El hábito de ejercitarse fue algo más complicado, ya que «hacer 50 sentadillas después del café matutino» no se volvió un hábito para un participante después de 84 días. Pero «caminar por 10 minutos después del desayuno» si lo fue para otro sujeto después de 50 días. Aunque el estudio solamente duró 84 días, al extrapolar las curvas entre hábito y automatización, se observó que algunos de los hábitos pueden tardar 254 días en formarse – casi un año.
Lo que el estudio sugiere es que la creencia de que bastan 21 días para formar un hábito es probablemente correcta, siempre y cuando lo único que quieras es tomar un vaso de agua después del desayuno. Algunas cosas más complicadas tomarán más tiempo para convertirse en un hábito realmente fuerte.
Pero aunque al principio parezca decepcionante, es una manera de recordarnos que desarrollar un hábito es cuestión de perseverancia y práctica deliberada. La máxima de Aristóteles dicta que la excelencia no es un acto, sino un hábito.»
Yo también soy el que soy. 
Heroísmo Agonizante 101 (Sólo para principiantes) 